Temporada 2013-2014
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AMFIV – AMIAB 61-68
AMFIV: Julio Vilas (11), Vicky Alonso (6), Samuel Rodríguez (-), Agustín Alejos (9), Lorenzo Envó (20) –cinco inicial-, Santi Comesaña (2), Txema Avendaño (4), Filipe Carneiro (-) y Nick Radovich (9).
AMIAB: Harry Brown (1), Domenech (4), Jaap Smid (2), Israel Sánchez (8), Roberto Mena (15) –cinco inicial-, Wayne Boardman (2), Maki (8), Sergio Martínez (16), Luis Cristen (12) y Pablo Rosendo (-)
PARCIALES: 19-18, 32-35 (descanso), 46-52 y 61-68 (final).
ÁRBITROS: Verde y Marqués. Sin eliminados.
INCIDENCIAS: Encuentro correspondiente a la primera jornada del Grupo 2 de la División de Honor de baloncesto en silla de ruedas disputado en el Pabellón de Bouzas ante la presencia de aproximadamente 150 espectadores.
El Amfiv tiene todavía mucho trabajo por delante. La pretemporada con sólo un partido de entidad ante el Fundación Grupo Norte ante la falta de presupuesto para disputar más amistosos pasó factura en el debut liguero del conjunto de César Iglesias, que todavía tiene que coger ritmo de competición y minutos sobre la pista de sus jugadores. Si a eso se le añade que para el estreno de la campaña el técnico vigués no pudo contar con el olímpico Bernabé Costas, recuperándose de una operación en un pie, ni con Txema Avendaño en plenitud de condiciones tras haber estado jueves y viernes con un virus y fiebre, se entiende bastante mejor la derrota ante un equipo que, por si fuera poco, ha fichado mucho y muy bien en su regreso a la máxima categoría nacional del baloncesto en silla de ruedas. Pese a todo, el Amfiv tuvo opciones de haber peleado el partido e incluso opciones de haberse estrenado con victoria, pero los múltiples errores propios y las incontables pérdidas de balón, muchas de ellas en momentos decisivos del encuentro, fueron un lastre demasiado pesado.
La ausencia de Costas limitaba también bastante la posibilidad de rotaciones a disposición de César Iglesias, a pesar de que la composición de la plantilla permite tantas opciones que ese factor no resultó fundamental en el choque. Eso sí, la baja del capitán, que recién salido del hospital estuvo en el banquillo apoyando a su equipo, se notó mucho en la pista. El primer cuarto, con los dos equipos intentando presionar la salida de balón del rival, empezó a dar muestras de cuál iba a ser el verdadero problema del Amfiv: las pérdidas. Las imprecisiones en los pases fueron una constante durante los cuarenta minutos permitiendo al Amiab respirar cuando los vigueses amagaban con despegar en el marcador (17-12, min.8).
Una tendencia que se acentuó en el segundo periodo (27-23, min.16) y que incluso permitió a los albaceteños cerrar el cuarto con un parcial de 0-6 para marcharse al descanso en ventaja (32-35, min.20).
En el intermedio, el Pabellón de Bouzas sufrió un pequeño apagón de luces, el mismo que tuvo el Amfiv al reanudarse el encuentro. El conjunto de César Iglesias tardó en entrar de nuevo en el encuentro y cuando se quiso dar cuenta, el Amiab, que supo explotar muy bien las continuaciones de sus puntos bajos con Maki y Mena geniales en las asistencias, ya había abierto un hueco que terminó siendo decisivo (33-41, min.23).
Porque los locales se acercaron en el marcador una vez (37-41, min.24), otra (42-43, min.27) y hasta una tercera (46-49, min.29). Pero de nuevo las pérdidas de balón en los momentos menos oportunos evitar la remontada y permitieron a los visitantes cerrar el cuarto con una renta corta pero interesante (46-52).
Una diferencia que se convirtió en definitiva con el parcial de 0-6 de inicio del último periodo, una vez más tras una serie de balones perdidos por el Amfiv. Un triple de Envó cortó la sangría (49-58, min.33) pero quedaba mucho por remar. Como es costumbre, por corazón no fue. Los pupilos de César Iglesias lo intentaron hasta el final y amenazaron con darle emoción a la recta final del partido poniéndose a sólo seis puntos y robando el balón a menos de un minuto (60-66, min.39). Pero tras un mal ataque, el intento forzado de tres de Envó no entró y ahí se acabó el partido. El Amiab se marchaba de Bouzas con la primera victoria de la temporada.
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El reto ya está cumplido. El Amfiv inicia este sábado su décimo segunda campaña consecutiva en la máxima categoría nacional del baloncesto en silla de ruedas. El conjunto de Pablo Beiro ha obrado de nuevo el milagro y, a pesar de no contar con patrocinador y haber tenido que reducir otra campaña más drásticamente su presupuesto, saldrá a competir. Lo hará, además, en mejores condiciones de las que se esperaba gracias al compromiso de una plantilla que, una vez más, ha pensado más con el corazón que con la cabeza. La práctica totalidad de los jugadores formados en la entidad, con la única excepción de David Mouriz, han elegido seguir en su equipo, en su casa, a pesar de que muchos de ellos tenían encima de la mesa ofertas mucho más interesantes en lo económico. Afortunadamente, el cariño hacia el club ha pesado más que el dinero, incluso en el caso de jugadores como Filipe Carneiro o el australiano Nick Radovich, que vivirán su primera experiencia en el Amfiv pero cuentan con tan buenas referencias que en su caso también el sentimiento se ha impuesto a la cartera. Ahora todo eso importa ya poco porque el balón empieza a rodar y el conjunto de César Iglesias debuta este sábado en el Pabellón de Bouzas (18.30 horas) ante un hueso duro, un recién ascendido como el Amiab Albacete pero que se ha reforzado mucho y muy bien para intentar acabar la primera fase de esta novedosa División de Honor entre los cuatro primeros y no verse así abocado a una agónica lucha por evitar el descenso. Una intención que comparten los vigueses aunque con la incógnita de saber realmente cuál es su nivel ante rivales de entidad después de que en pretemporada únicamente pudieran medir fuerzas la semana pasada ante el Fundación Grupo Norte. El tercer puesto en Liga y Copa de la temporada pasada es ya un recuerdo lejano, un remoto sueño que intentar alcanzar, pero siempre conscientes de que el Amfiv es un club especial, distinto, que no puede ofertar las mareantes cifras que manejan otros muchos equipos de la División de Honor, pero que tiene algo mucho más importante: corazón.
El limitado presupuesto de los vigueses ha derivado en una atípica pretemporada, con sólo un enfrentamiento ante un adversario de verdadera entidad, un partido en el que el conjunto de César Iglesias sufrió mucho en una desastrosa primera parte pero que mostró una notable e ilusionante mejoría en la segunda. Sin embargo, el técnico no se queja porque “en los entrenamientos, en el día a día y en el trabajo de cada sesión veo al equipo listo para competir. Claro que nos falta vivir la experiencia de medirnos contra equipos de nuestro nivel y estar en situaciones de partido real, con alguien que no conoces enfrente, con arbitrajes... Todo lo que implica jugar un partido serio. Tuvimos una pequeña prueba en Valladolid, de la que por diversos motivos hay que descartar la primera parte, pero la verdad es que no sabemos qué cara va a mostrar el equipo en los partidos. Esperamos y deseamos que no nos pase factura y que podamos ya competir a buen nivel desde este primer partido”.
El estreno liguero del Amfiv no será sencillo puesto que visita Bouzas el Amiab albaceteño. A priori, podría parecer que el choque ante un rival recién ascendido es el ideal pero nada más lejos de la realidad. El Amiab se ha reforzado mucho y bien para quedarse en la elite del baloncesto en silla de ruedas nacional, fichando, entre otros, a dos internacionales y olímpicos con la selección española, Maki y Roberto Mena. “Por lo que he leído y me han contado, parece ser que han fichado a dos buenos cuatros anotadores. Precisamente, nosotros en el partido ante Valladolid tuvimos problemas con un cuatro anotador detrás de una pantalla, si bien es cierto que en la segunda parte estuvimos más activos sobre él. Creo que en Amiab tanto Mena como Maki intentarán aprovechar esa misma situación. Estamos trabajando para solucionar esos problemas y si lo hacemos, estaremos en partido”, analiza César Iglesias, quien se muestra expectante por ver “cómo responde el equipo ofensivamente. No tenemos que perder la idea de juego que estamos trabajando y caer en individuales, que es lo que nos está costando en ciertos momentos”.
Iniciar la temporada con una victoria es siempre importante, especialmente en una remodelada competición a la que todavía está por ver cómo se adaptan los equipos. “Creo que nuestro grupo, quitando algún caso, es muy igualado y que hay que ir partido a partido porque será complicado. En el otro, Fundosa, como también lo sería en una liga regular, es el claro favorito y de cara a la segunda fase puede descafeinar un poco la Liga porque los que salgan de nuestro grupo a pelear por el título es muy posible que lleven más derrotas que el resto. De todas formas, siempre es importante empezar una competición ganando porque da un plus de confianza en el trabajo que estás haciendo y de cada a los siguientes partidos te libera un poco de ese posible estado de ansiedad por conseguir el primer triunfo”, analiza el entrenador del Amfiv, quien subraya que “es fundamental ganar en casa porque muchas veces las primeras semanas, por fortuna o por desgracia, marcan un poco que los equipos estén en un sitio u otro y que cojan una dinámica buena o mala”.
Eso sí, para el estreno ante los albaceteños, César Iglesias contará con la posible baja de uno de sus jugadores más importantes, el olímpico Bernabé Costas. “Para el equipo, si se confirma su ausencia, sería un contratiempo importante no sólo por lo que aporta en la pista si no también porque es nuestro capitán, un símbolo para el equipo. De todas formas, lo que es seguro es que no va a estar al cien por ciento y tendremos que intentar que si no juega se note lo menos posible”, finaliza.
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Los alumnos de 1º de la ESO del Colegio Labor inauguraron este lunes las visitas que cada temporada realiza el conjunto vigués a centros educativos de Vigo y su área de influencia para promover el deporte en general y el baloncesto en silla de ruedas en particular dentro de la idea fundacional del club que es buscar la integración del discapacitado a través del deporte. Desde las 10.30 hasta las 12.00 horas, los jóvenes escolares pudieron conocer un poco más de cerca a algunos de los miembros del Amfiv, empezando por dos de los integrantes de su cuerpo técnicos, Óscar Carbajo y Sergio González, y continuando por los jugadores Agustín Alejos, Santi Comesaña, Julio Vilas, Txema Avendaño y el australiano Nick Radovich.
Después de conocer un poco más acerca del deporte discapacitado, del Amfiv y del baloncesto en silla de ruedas y de las obligadas presentaciones, los alumnos se dividieron en tres grupos para probar en primera persona la dificultad que entraña el manejo de la silla de ruedas, practicar los pases y lanzamientos y acabar realizando incluso entradas a canasta. Todo esto antes de acabar con un pequeño partido de cinco contra cinco en el que los jóvenes estudiantes del Colegio Labor pudieron mostrar todo lo aprendido y en el que el equipo capitaneado por Julio Vilas se impuso al de Agustín Alejos y Nick Radovich y al de Santi Comesaña y Txema Avendaño.
Este miércoles será el turno para otro grupo de alumnos también de 1º de la ESO del Colegio Labor, que repetirán la actividad con un esquema muy similar al de sus compañeros e idéntico horario, de 10.30 a 12.00 horas en el Pabellón de Bouzas.
Puedes consultar aquí la galería completa de imágenes de la visita.
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FUNDACIÓN GRUPO NORTE – AMFIV 57-44
FUNDACIÓN GRUPO NORTE: Sonia Ruiz (2), Robles (2), Alberto Carrión (2), Lalo (16), Dan Highcock (27) –cinco inicial-, Juan Luis Pérez (-), Pablo López (2),
AMFIV: Julio Vilas (5), Bernabé Costas (3), Samuel Rodríguez (2), Agustín Alejos (4), Lorenzo Envó (11) –cinco inicial-, Santi Comesaña (-), Alberto Abalde (2), Txema Avendaño (4), Luismi González (-), Vicky Alonso (-) y Nick Radovich (13).
PARCIALES: 13-8, 36-12 (descanso), 47-31 y 57-44 (final).
INCIDENCIAS: Encuentro amistoso disputado en el Pabellón Pilar Fernández Valderrama de Valladolid.
La pretemporada toca a su fin. Quedan sólo siete días para que empiece lo serio y al Amfiv le queda aún bastante trabajo por delante. La dificultad para encontrar rivales de entidad ante los que medir fuerzas en esta etapa de preparación convertía la cita de este sábado en el Pilar Fernández Valderrama de Valladolid en el único método para poder evaluar en qué momento se encuentra el conjunto de César Iglesias y Óscar Carbajo. El Fundación Grupo Norte, mucho más rodado tras haber jugado amistosos ya ante varios conjuntos de la máxima categoría, recordó a los vigueses lo que se van a encontrar en la División de Honor. El resultado al descanso evidenciaba que el Amfiv aún tiene mucho camino que recorrer (36-12). Pero si algo tiene este equipo es orgullo y tiró de él en la segunda mitad para demostrar que aprovechará los siete días que quedan antes de estrenar la Liga en Bouzas frente al Amiab albaceteño para seguir progresando. La derrota, por supuesto, era lo de menos (57-44). Lo importante es que, después de una desastrosa primera mitad, los vigueses vuelven a casa con el buen sabor de boca de haber conseguido reaccionar, mostrando una imagen totalmente distinta en la segunda parte.
El Amfiv inició ya su desplazamiento a Valladolid con malas noticias. Una de sus caras nuevas para esta temporada, el portugués Filipe Carneiro, no viajaba con el resto del equipo debido a una fuerte gripe. Sí lo hacía otro de los puntos bajos, Santi Comesaña, aunque todavía recuperándose de la misma dolencia, que le había impedido entrenar el jueves. Además, el conjunto vigués, para ahorrar costes, realizaba el desplazamiento en furgoneta, saliendo de Vigo esa misma mañana y llegando a Valladolid instantes antes del comienzo del choque.
Todo eso pudo influir en la mala primera parte de los pupilos de César Iglesias, en la que sólo consiguieron anotar 12 puntos en veinte minutos de juego. Las incontables pérdidas de balón lastraron notablemente la ofensiva de un conjunto vigués que, en la mayoría de los ataques, no llegaba ni siquiera a tirar a canasta. Por si esto no fuera suficiente, la defensa del Amfiv dejó mucho que desear en intensidad. El gran beneficiado de esta circunstancia fue el internacional inglés Dan Highcock, que empezó el partido muy enchufado y aprovechó las pantallas de sus compañeros para anotar 21 de sus 27 puntos en esta primera parte. Por eso, casi la mejor noticia fue que al descanso sólo se perdía por 24 puntos (36-12).
Afortunadamente, el intermedio sirvió para que el Amfiv despertase y mostrase algo de lo que puede llegar a ser capaz. Los vigueses empezaron a defender a correr, a tirar y, gracias a todo esto, a meter puntos. Fruto de esta mejoría, se anotaron con claridad el parcial del tercer cuarto (11-19). La distancia seguía siendo muy grande pero el conjunto de César Iglesias mostraba ahora otra cara muy distinta. Ahora sí era el Amfiv (47-31, min.30).
La línea ascendente se mantuvo en los diez últimos minutos. Lo de menos era el marcador porque las opciones de pelear por el triunfo se habían esfumado ya casi por completo al intermedio. Lo verdaderamente importante era cerrar el último encuentro de pretemporada con buenas sensaciones y los vigueses sí que consiguieron ese objetivo. Volvieron a ganar el último cuarto (10-13), insuficiente para impedir que el Fundación Grupo Norte se quedase con la victoria (57-44) pero esperanzador para afrontar la última semana de trabajo antes del estreno liguero.
Igual de esperanzador fue el estreno con la camiseta del Amfiv del recién llegado, el australiano Nick Radovich, máximo anotador de los vigueses en este partido con 13 puntos y uno de los más destacados en el resurgir del equipo en la segunda mitad.
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A sólo una semana para el comienzo de la temporada en la División de Honor, el Amfiv acaba de concretar una inesperada incorporación, con la que cerrará ya definitivamente su plantilla para afrontar esta campaña 2013-2014. Se trata del australiano Nick Radovich, un jugador clase 3,5 que ha estado ya durante estos últimos días en Vigo entrenando a las órdenes de César Iglesias mientras se concretaba la operación y que este mismo sábado, a partir de las 18.00 horas, debutará con su nuevo equipo en Valladolid, en el último amistoso de pretemporada del Amfiv que le enfrentará al Fundación Grupo Norte.
La sorprendente llegada de Nick Radovich al conjunto vigués tiene dos causantes fundamentales -Agustín Alejos y el propio jugador australiano- y una historia curiosa detrás que refleja el tremendo interés mostrado por Radovich para vestir esta campaña la camiseta del Amfiv. “Al acabar la pasada temporada, empezamos a buscar opciones para reforzar nuestro juego interior. Agustín Alejos nos habló de un compañero suyo en el Queensland Spinning Bullets, un jugador clase 3,5, alto y con buen tiro, que podría ser interesante para nosotros. Vimos algunos vídeos y decidimos ponernos en contacto con él. Contando con la posibilidad de encontrar algún posible patrocinador durante el verano, le presentamos una oferta ya bastante por debajo de lo que están ofreciendo el resto de los clubes de la Liga Española pero dentro de nuestras posibilidades. Y Nick aceptó”, explica el máximo responsable deportivo del Amfiv, José Antonio Beiro.
Hasta ahí, una negociación típica y tópica en cualquier fichaje. Lo interesante llegó unos meses después, cuando los esfuerzos del Amfiv para encontrar alguna empresa que apoyase económicamente su proyecto no dieron el resultado esperado y, además, en previsión de los más que probables recortes en las subvenciones de las entidades públicas, el conjunto vigués se vio obligado a rebajar nuevamente su presupuesto. Ahí llegó el momento de ponerse en contacto de nuevo con Nick para comunicarle que “lo sentíamos muchísimo pero que no iba a poder ser, que no podíamos comprometernos y hacerle venir a Vigo sin estar seguros de que íbamos a poder hacer frente a las cantidades pactadas durante toda la temporada”, recuerda Beiro.
La sorpresa fue mayúscula tras su contestación. “Conocía la delicada situación económica de nuestro club a través de Agustín Alejos y entendía perfectamente nuestra postura. Es más, agradeció mucho nuestra sinceridad y honestidad pero también nos dejó claro que él quería jugar en el Amfiv y que el dinero no iba a ser un problema para conseguirlo. La buena publicidad que Agustín había hecho de nuestro club y de nuestra ciudad nos abría la posibilidad de conseguir un fichaje al que económicamente no podíamos optar”, puntualiza el director deportivo vigués, todavía sorprendido y agradecido por el gesto del australiano. “No es normal que un jugador extranjero anteponga los sentimientos al dinero y eso que en el Amfiv ya estamos bastante acostumbrados a esto porque es lo que temporada tras temporada hacen los jugadores de la casa, rechazando ofertas más suculentas económicamente para seguir defendiendo su camiseta, la del equipo de su ciudad. Nick ha decidido apostar esta temporada por nosotros, con el compromiso de que la próxima campaña intentaremos compensárselo. Su gesto nos da nuevos ánimos para trabajar aún más duro en la búsqueda de recursos e intentar que se pueda quedar muchos años más con nosotros”, desea Beiro.
ÚLTIMA CITA DE PRETEMPORADA
Precisamente, Nick Radovich llegará a tiempo para disputar sus primeros minutos con el Amfiv justo en el partido amistoso que cerrará la pretemporada del conjunto vigués, una pretemporada escasa de encuentros ante la dificultad para encontrar rivales que quieran venir a Vigo y la imposibilidad de afrontar costosos desplazamientos antes de iniciar la campaña por el limitado presupuesto del club. Así, la cita de este sábado en Valladolid (18.00 horas) ante el Fundación Grupo Norte será el primer y único test de entidad ante un rival de su misma categoría, un partido que permitirá a César Iglesias y Óscar Carbajo saber el punto en el que se encuentra su equipo a sólo siete días del debut liguero en el Pabellón de Bouzas ante el Amiab albaceteño.
