CAI ZARAGOZA – AMFIV 58-63
CAI ZARAGOZA: Genry Tejada (6), Maldonado (10), David Anaya (6), Xavi Escuder (4), Jhon Hernández (28) –cinco inicial-, Rodríguez (2), Pablo Laviña (-), Walter de Horta (2) y Adrián Lorenzo (-).
AMFIV: Lorenzo Envó (24), Julio Vilas (7), Bernabé Costas (11), Filipe Carneiro (-), Txema Avendaño (12) –cinco inicial-, Manu Lorenzo (-), Samuel Rodríguez (-), Karol Szulc (-), Jose Teijido (-) y Savoy Brown (9).
PARCIALES: 12-11, 24-34 (descanso), 38-43, 52-52 y 58 -63 (final).
ÁRBITROS: De Agustín, Ranera y Cubero. Excluyeron por cinco faltas personales a los jugadores locales Tejada y Maldonado y al visitante Envó.
INCIDENCIAS: Encuentro correspondiente a la tercera jornada en el Grupo 1 de la División de Honor de baloncesto en silla de ruedas disputado en el PDM José Garcés de Zaragoza.
El Amfiv sigue muy lejos de su mejor versión tanto en ataque como en defensa y a punto estuvo este sábado de sufrir otra derrota que habría complicado mucho las opciones de los vigueses de meterse en el play off por el título y escapar así de la lucha por el descenso. Afortunadamente, una canasta a falta de cinco segundos de Txema Avendaño permitió al conjunto de César Iglesias forzar la prórroga en la que acabaría haciéndose con el triunfo ante un CAI Zaragoza que, de la mano de Jhon Hernández, se creció en la segunda mitad y casi le cuesta un nuevo disgusto al Amfiv. Los problemas en los tiros libres, con un escasísimo 9 de 19 para apenas un 47,4 por ciento de acierto, los múltiples errores en lanzamientos aparentemente sencillos desde debajo del aro y las 21 pérdidas de balón fueron una losa muy importante para los visitantes que, además, sufrieron mucho a la hora de defender al colombiano Jhon Hernández, superior siempre a sus pares en el uno para uno y buscando y encontrando constantemente la superioridad en los emparejamientos.
A pesar de todos estos condicionantes en su contra, los primeros veinte minutos se saldaron con una interesante renta a favor del conjunto de César Iglesias, que se plantó en el descanso con un marcador de 24-34 a su favor y la sensación de que, a pesar de no tener un buen día, tenía el choque más o menos controlado. Sin embargo, todo cambió tras el intermedio. El Amfiv tuvo la posibilidad de dejar el choque ya casi visto para sentencia con cuatro o cinco acciones consecutivas debajo del aro para anotar. Pero no lo hizo y permitió, además, al CAI Zaragoza anotar con relativa facilidad al contragolpe o en transiciones con un pésimo ajuste defensivo, con dos jugadores vigueses defendiendo en muchas ocasiones al mismo rival y permitiendo a otro adversario anotar completamente solo.
De este modo, el marcador se fue estrechando (38-43, min.30) y los nervios empezaron a atenazar todavía más al Amfiv. El encuentro se convirtió en una ruleta rusa que pudo haber favorecido a cualquiera de los dos equipos. De hecho, el CAI Zaragoza ya se veía prácticamente vencedor cuando un buen bloque y continuación entre Lorenzo Envó y Txema Avendaño permitió al segundo anotar la canasta que mandaba el choque al tiempo extra a falta de cinco segundos para la conclusión del tiempo reglamentario. Porque la presión viguesa en ese último suspiro impidió incluso que los locales pudieran llegar a tirar.
En la prórroga, el Amfiv realizó algunos ajustes en su defensa para tratar de parar la sangría de puntos producida por Jhon Hernández y la variación dio resultados, minimizando la aportación del colombiano. Pese a todo, los errores en los tiros libres todavía mantuvieron la incertidumbre hasta el último instante, obligando a los vigueses a sudar hasta el último segundo para conseguir la victoria.