ALDASA AMFIV – FUNDOSA ONCE 64-72
No pudo ser. El conjunto de César Iglesias no consiguió protagonizar la gran sorpresa en la última jornada de la primera vuelta en la División de Honor de baloncesto en silla de ruedas. Como ya sucediera ante el otro colíder de la máxima categoría, el Fundación Grupo Norte, el Aldasa puso contra las cuerdas al Fundosa Once, aunque en ambas ocasiones el triunfo se escurrió entre los dedos. Ante los pucelanos fue una sucesión de acciones desafortunadas en los últimos segundos y frente a los madrileños la clave del choque estuvo en una polémica canasta más adicional seguida de una falta técnica al entrenador vigués mediado el tercer cuarto, que permitió al Fundosa pasar del 33-34 al 33-41, abriendo la brecha de ocho puntos que a la postre fue decisiva (64-72).
Los jugadores y el cuerpo técnico del Amfiv habían realizado una arriesgada apuesta durante la semana para intentar que el pabellón de Bouzas presentase el mejor aspecto posible ante uno de los candidatos a pelear por el título liguero. Ellos sabían que para ganar toda ayuda iba a ser necesaria y, por eso, decidieron pagar de su propio bolsillo las entradas de todos los aficionados que acudiesen al encuentro. Su llamamiento surtió el efecto deseado y Bouzas ofreció su mejor cara. El pabellón prácticamente se llenó y, desde el primer instante, el público dejó claro que iba a ofrecer su ánimo al Aldasa para buscar la gesta. Sus ánimos sirvieron para sacar fuerzas de flaqueza en los momentos complicados y para hacer temblar, aunque mínimamente, las muñecas de jugadores de la talla de Chambers o Terry Bywater, que notaron la presión de la grada especialmente cuando tuvieron que acudir a la línea de tiros libres.
Además, los locales ofrecieron también muy pronto motivos para merecer el apoyo de su afición. Los pupilos de César Iglesias salieron muy enchufados, sobre todo un sensacional Bernabé Costas, autor de 12 puntos en el primer cuarto, y con una defensa a toda pista muy agresiva dejaron claro desde el inicio a los madrileños que iban a tener que sudar de lo lindo. Porque el primer parcial se cerraba con 21-18 para los vigueses.
Al poco de iniciarse el segundo periodo llegaba la primera mala noticia para César Iglesias. Los árbitros castigaban al australiano Shawn Russell con su tercera falta personal y el internacional “aussie”, que había sido también de los más destacados en los diez minutos iniciales con 6 puntos y una buena defensa, se tenía que ir al banquillo. La intensidad del juego empezaba a notarse en el acierto en las acciones y tras el 23-20 de David Mouriz (min.11) ambos conjuntos estuvieron más de cinco minutos sin volver a anotar (25-20, Berni Costas, min.16).
Los puntos llegaban con cuentagotas y esa renta de cinco puntos parecía muy jugosa para afrontar el descanso (27-22, min.18) hasta que Bywater, el auténtico sostén del Fundosa gracias a sus 25 puntos, la reducía a la mínima expresión antes del intermedio (27-26, min.20).
La reanudación del encuentro apenas cambió la decoración del mismo. La igualdad seguía siendo máxima y ninguno de los dos equipos conseguía despegarse hasta que llegó la jugada clave. Otro buen lanzamiento de Costas colocaba el marcador en 33-34 para los madrileños cuando los árbitros concedieron una polémica canasta más adicional de Chambers, además de castigar a un incrédulo César Iglesias con una falta técnica. Siete puntos para el Fundosa en un abrir y cerrar de ojos (33-41, min.24) para romper un choque que hasta ese momento era de máximo equilibrio.
Pese a todo, el Aldasa y su público no iban a rendirse. Y eso que un triple más adicional de Pollock colocaba la renta de los visitantes por encima de la barrera psicológica de los diez puntos casi al final del tercer periodo (42-53, min.29). Pero Lorenzo Envó contestó con otro salvador triple y Agustín Alejos aportó tres tiros libres para dar vida a los vigueses de cara a los diez minutos decisivos (48-53, min.30).
El tremendo esfuerzo realizado en defensa necesitaba todavía de un empuje más y los locales encontraron el aire necesario en el apoyo de la grada. Así, una canasta de Mouriz hacía soñar con tumbar al todopoderoso Fundosa (54-57, min.33). Pero las fuerzas empezaban a escasear y los madrileños encontraron un hueco en la zaga viguesa y lo aprovecharon. Gómez, en dos ocasiones, Pollock y Llambi consiguieron una cómoda posición de lanzamiento prácticamente desde el tiro libre y el parcial de 0-8 se antojaba definitivo (54-65, min.36).
Pero si algo tiene el Amfiv es corazón. El público había respondido a su llamada y ellos no iban a defraudar. Ni siquiera si la situación se ponía prácticamente imposible (58-69, min.38). Porque una canasta de Russell y un dos más uno de Envó mantenían viva la esperanza (63-69, min.39). Pero las expulsiones por faltas personales de Costas y del propio Envó dieron la puntilla a los vigueses, que, aún así, fallaron un par de bandejas en el último minuto para haber puesto un poco más nervioso a un Fundosa que sólo tras el pitido final pudo respirar aliviado (64-72). Eso sí, tuvo que hacerlo mientras la grada de Bouzas agradecía con una sonora ovación el buen partido realizado por los suyos y éstos correspondían a su afición reconociendo la importancia de su apoyo con otro aplauso.
ALDASA AMFIV: David Rodarte (-), Bernabé Costas (20), Lorenzo Envó (18), David Mouriz (6), Shawn Russell (12) –cinco inicial-, Agustín Alejos (8), Moncho Pombo (-), Vicky Alonso (-).
FUNDOSA ONCE: John Pollock (11), Rafa Muiño (8), Llambi (4), Terry Bywater (25), Gavira (6) –cinco inicial-, Rodríguez (-), Chambers (12), Gómez (-).
PARCIALES: 21-18, 27-26 (descanso), 35-41 y 64-72 (final).
ÁRBITROS: Verde y Marqués. Eliminaron por cinco faltas personales a los jugadores del Aldasa Bernabé Costas (min.38) y Lorenzo Envó (min.39).
INCIDENCIAS: Encuentro correspondiente a la undécima jornada de la División de Honor de baloncesto en silla de ruedas disputado en el Pabellón de Bouzas. Prácticamente lleno.
